
Este es el origen de la rivalidad entre Israel e Irán
La Revolución Islámica de 1979 marcó un punto de quiebre en las relaciones entre ambas partes, que durante años se han acusado mutuamente de atentados que ninguna de estas ha reconocido. Las tensiones se han agudizado significativamente tras el estallido de la guerra en la Franja de Gaza.

Las tensiones entre Israel e Irán se han incrementado aún más desde que las fuerzas israelíes realizaron una serie de ataques contra las instalaciones nucleares y de misiles iraníes, durante la madrugada del viernes 13 de junio.
La ofensiva israelí impactó objetivos militares y zonas residenciales, mientras que también provocó la muerte de al menos dos altos mandos iraníes.
Entre los fallecidos se encuentran el líder de la Guardia Revolucionaria de Irán, el general Hossein Salami, y el jefe del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas, el general Mohammad Bagheri, además de otros dirigentes militares y científicos.
Cuando empezaron los ataques, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, reiteró sus acusaciones de que Irán busca fabricar armas nucleares, lo que ha sido negado por las autoridades de Teherán.
“Si no se detiene, podría producir un arma nuclear en muy poco tiempo. Podría tardar un año. Podría tardar unos meses, incluso menos de un año. Esto supone un peligro claro y presente para la propia supervivencia de Israel”, sostuvo el líder israelí.
Junto con ello, prometió que la operación continuará “durante los días que sean necesarios”.

Desde Teherán respondieron con una contraofensiva que incluyó alrededor de 200 misiles entre el viernes y la noche del sábado, de los cuales la mayoría fueron interceptados por los sistemas de defensa israelíes, al igual que los drones que habían lanzado previamente.
El líder supremo de Irán, el ayatolá Alí Jamenei, aseguró que Israel recibiría un “castigo severo” por su ofensiva del viernes, la cual involucró a unas 200 aeronaves que atacaron un centenar de objetivos.
Por su parte, el ministro de Exteriores iraní, Abbas Araghchi, calificó los ataques israelíes como “una declaración de guerra”.
Aunque Israel e Irán han mantenido tensiones durante décadas, estas se agudizaron tras el 7 de octubre de 2023, cuando el grupo militante Hamas realizó una ofensiva contra Israel que dejó 1.200 muertos y 250 secuestrados.
Tras dicha operación, las fuerzas israelíes han respondido con ataques en la Franja de Gaza, los cuales han dejado al menos 54.880 muertos, según denuncia el Ministerio de Salud local.
A lo largo de la guerra, Israel se ha enfrentado tanto a Irán como a sus aliados en Medio Oriente, entre los cuales se encuentran Hamas en Gaza, Hezbolá en Líbano y los hutíes en Yemen.
Cada uno de estos grupos es parte del llamado Eje de la Resistencia, una red de milicias potenciada por Teherán que busca contrarrestar la influencia de Israel y Estados Unidos en la región.
Las autoridades israelíes han acusado a Irán de financiar a organizaciones “terroristas” y de realizar ataques contra sus intereses, mientras que Irán ve a Israel y a su principal aliado como una amenaza para los suyos.
Pese a que tanto Israel como Irán se han acusado mutuamente de realizar atentados en su contra, generalmente ninguna de las partes ha asumido la autoría de las operaciones.

Cómo y cuándo estallaron las tensiones entre Israel e Irán
Las relaciones entre ambas partes eran estables hasta que la Revolución Islámica de los ayatolás se tomó el poder en 1979.
Previamente, Irán se había opuesto al plan para la partición de Palestina que dio lugar a la creación del Estado de Israel en 1948.
Sin embargo, fue el segundo país islámico en reconocerlo. El primero fue Egipto.
Por ese entonces, Irán era dirigido por los shas de la dinastía Pahlaví, mientras que también era uno de los principales aliados de Estados Unidos en la región.
Cuando el primer jefe de gobierno israelí, David Ben-Gurion, asumió el poder, consiguió entablar relaciones cordiales con Irán.
No obstante, la Revolución iraní de 1979 liderada por Ruhollah Jomeini derrocó a la monarquía gobernante hasta ese momento e instauró una república islámica.
Entre sus bases se encontró el rechazo por el “imperialismo” de Estados Unidos y por su aliado Israel.
Esto último llevó a que los ayatolás rompieran relaciones con Israel y dejaran de reconocer la validez del pasaporte de sus ciudadanos, según rescata la BBC.
Junto con ello, se apoderaron de la embajada israelí en Teherán, para así facilitarla a la Organización para la Liberación de Palestina (OLP)
El director del Programa para Irán del centro de análisis International Crisis Group, Alí Vaez, explicó al citado medio que “la animadversión hacia Israel fue un pilar del nuevo régimen iraní debido a que muchos de sus líderes se habían entrenado y participado en acciones de guerrilla con los palestinos en lugares como Líbano y tenían una gran simpatía por ellos”.
De acuerdo a su análisis, “el nuevo Irán quería proyectarse como una potencia panislámica y enarboló la causa palestina frente a Israel que los países musulmanes árabes habían abandonado”.

No obstante, según Vaez, la hostilidad por parte de Israel hacia Irán se vio agudizada posteriormente, ya que hasta la década del 90 se percibía como una mayor amenaza al régimen de Saddam Hussein en Irak.
Aquello llevó a que el gobierno israelí fuese uno de los mediadores para el llamado plan Irán-Contra, una programa secreto mediante el que Estados Unidos facilitó el envío de armas a Irán para que fuese utilizado en su guerra contra Irak, que se desarrolló entre 1980 y 1988.
Vaez agregó que, con el paso de los años, Israel comenzó a ver a Irán como uno de sus principales enemigos.
Las tensiones entre ambas partes en el tiempo se han visto marcadas por lo que varios analistas han descrito como una “guerra en la sombra”, debido a que tanto Israel como Irán han sufrido ataques que ninguna de los dos se atribuye, pese a que se han acusado cruzadamente.
Desde Israel han sostenido que Irán busca desarrollar armas nucleares que podrían amenazar su supervivencia.
Sin embargo, desde Irán han rechazado esa afirmación y han asegurado que su programa nuclear tiene fines civiles.
Teherán ha acusado a la inteligencia israelí, el Mossad, de atentar contra alguno de sus principales científicos especialistas en el ámbito nuclear.
Israel, por su parte, ha enfatizado que Irán y sus aliados del Eje de la Resistencia han sido los autores de distintos atentados.
Las tensiones entre ambas partes se han incrementado progresivamente con los años y han adoptado un carácter más directo con sus ataques realizados tras la ofensiva del 7 de octubre de 2023 por parte de Hamas hacia Israel.
En medio de este escenario, distintos analistas han planteado que las recientes operaciones de junio de 2025 podrían desencadenar un conflicto más amplio en la región.
COMENTARIOS
Para comentar este artículo debes ser suscriptor.
Lo Último
Lo más leído
1.
2.