Los planes de Nicolás Jarry para asaltar el top 20 del ranking mundial

Nicolás Jarry, impactando una derecha en su partido frente a Carlos Alcaraz. Foto: Toby Melville/REUTERS.

Después de alcanzar la tercera ronda de Wimbledon y cerrar una inolvidable primera parte del año, el mejor tenista nacional preparará en Barcelona la segunda mitad de la temporada, donde asoman nuevos desafíos.



Un primer semestre soñado tuvo Nicolás Jarry. Comenzó el año en el puesto 152 y en la segunda semana de enero cayó hasta el 155. Sin embargo, no estaba dispuesto a repetir una temporada tan irregular como la anterior. Para ello, junto al cuerpo técnico encabezado por Juan Ozón realizaron una pretemporada muy dura en Barcelona, donde el tenista se reenfocó para enfrentar este 2023. Ocho meses después, los resultados están a la vista: hoy es el 28 del mundo y tiene la posibilidad concreta de seguir subiendo en el ranking.

Dos títulos ATP (Santiago y Ginebra) y su mejor actuación en Roland Garros (octavos de final) y Wimbledon (tercera ronda) confirman su gran presente. En La Catedral maravilló al mundo pese a no poder derrotar al número uno del planeta, el español Carlos Alcaraz. No obstante, lo hizo ver mal, lo que él mismo reconoció. Además, le auguró un gran futuro. “Él se merece estar arriba. Honestamente, veo el nivel de Jarry, el nivel hoy, seguro que va a estar en el top 10. Si tengo que apostar, apuesto a que al final del año va a romper el top 10 o va a estar muy, muy cerca si todavía está jugando a ese nivel”, señaló el murciano tras el duelo que duró casi cuatro horas.

Y la predicción de Carlitos tiene asidero, pues el número uno del país defiende muy pocos puntos de aquí a fin de año. En total, son 166 unidades, cuya última defensa son los 35 que consiguió en el US Open de 2022, por lo que de ahí en adelante tiene el camino libre para solo sumar. Incluso, si no jugara más en lo que resta de 2023, aseguraría terminar el año dentro de los 35 mejores del mundo.

Del top 20, la diferencia es de apenas 259 puntos, por lo que la ilusión de acercarse a ese grupo es alta, y además está sustentada en una probabilidad estadística y en el gran nivel que ha mostrado el tenista nacional, que ya con lo realizado se ubica entre los 20 mejores del año y por primera en una sola temporada superará el millón de dólares en ganancias, con el premio conseguido en Wimbledon.

Regreso a Barcelona

Ya durante Roland Garros, el cuerpo técnico de Jarry tenía bastante avanzada la planificación para cuando terminara la gira de pasto, donde disputaría los torneos de Halle, Eastbourne y Wimbledon. “Lo tenemos bastante claro, aunque no está cien por ciento confirmado, pero después de pasto haremos otro ciclo de preparación en Barcelona con Toni Estalella, y nos iremos a preparar cemento y a jugar en cemento. Es un poco la idea que tenemos y que a Nico también le parecía atractiva, ya que tenemos que subir el nivel en todas las superficies y la pista rápida es una donde podemos seguir creciendo”, adelantó Juan Ozón, en entrevista con La Tercera.

Precisamente, después de cerrar esta importante gira, la planificación del equipo quedó totalmente definida. Luego de su actuación en la capital británica, Jarry tomará unos días de descanso junto a su familia y volverá a reunirse con su cuerpo técnico en Barcelona, para comenzar los entrenamientos este viernes 14, donde también realizará un ciclo de trabajo físico.

A diferencia de esta misma época del año pasado, la preparación se llevará a cabo en canchas de cemento, como ya adelantaba su coach, con el objetivo de perfeccionar el juego en ese tipo de superficie, mirando de reojo la gira norteamericana en pista dura y también la fase de grupos de las finales de la Copa Davis, en Bolonia, donde Chile se medirá con Suecia, Italia y Canadá.

¿Cuándo vuelve a jugar?

Después de un par de semanas de acondicionamiento, Nicolás Jarry regresará al circuito en el ATP 500 de Washington, que comenzará el 31 de julio. Ahí el chileno espera ser uno de los sembrados. Ese será el primer torneo que dispute en canchas rápidas desde el Abierto de Australia, ya que tras ganar Santiago no participó en Indian Wells ni en Miami.

Luego, en el horizonte, aparecen los Masters 1000 de Toronto (7 al 13 de agosto) y el de Cincinnati (del 13 al 20 de agosto) antes de disputar el Abierto de Estados Unidos, certámenes donde el tenista nacional irá en busca de los valiosos puntos que le permitan meterse en el grupo de avanzada del tenis mundial.

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