Los Bucks se hacen respetar en casa

"Será el partido más importante para nosotros y a diferencia de lo que sucedió con la serie ante los Celtics de Boston, que lo perdimos, esta vez no podemos permitirlo", dijo el martes Giannis Antetokounmpo (24 años y 2,11 metros), el ala-pivote que brilla en los Milwaukee Bucks con promedios de 27,4 puntos, 11,4 rebotes y 4,4 asistencias en los nueve partidos de los Playoffs de la NBA que ha disputado.

Y la noche del miércoles,  en el choque que abrió la final de la Conferencia Este ante Toronto Raptors, ratificó esa decisión de no permitir sorpresas al concluir con victoria por 108-100 ante los canadienses, aunque lo cierto es que los locales volcaron el juego solamente en el último cuarto, cuando anotaron 32 de sus puntos, luego de una muy floja primera mitad.

El griego de padres nigerianos (nació en Atenas) cumplió también desde el punto de vista personal, pues anotó 24 puntos, recogió 14 rebotes y metió seis asistencias, convirtiéndose en el mejor de la cancha en los dos últimos acápites (seguido por el forastero Marc Gasol). Su rol fue completo, además, en el capítulo de cierre, pues habilitó, trabajo fuertemente en defensa y aprovechó la energía de Brook López, quien anotó 29 puntos, dos menos que el más certero del campo, el visitante Kawhi Leonard.

El éxito de los Bucks ha sido esperado por mucho tiempo. Su único anillo de campeón de la NBA llegó en 1971, cuando una escuadra que incluía a las leyendas Kareem Abdul-Jabbar y Oscar Robertson venció a los Bullets de Baltimore.

En el Oeste, en tanto, Golden State Warriors también hizo valer su condición de local, además de favorito de su serie, y está 1-0 sobre Portland Trail Blazers. La noche de este jueves, en el Oracle Arena, de Oakland, se disputa el segundo partido.