El agrio final de Soltera Otra Vez

El lunes 5 de marzo fue un día auspicioso para Canal 13. ¿El motivo? El estreno de la tercera parte de Soltera otra vez, el que alcanzó un rating de 13,1 puntos y fue lo segundo más visto del bloque prime, debajo de su símil de Mega, Perdona nuestros pecados.

La historia de la acontecida Cristina Moreno (Paz Bascuñán) volvía la pantalla después de cuatro años, y lo hacía con nuevos personajes y como la gran apuesta del área de ficción, que no programaba una teleserie nocturna hace más de un año. Por lo demás, tenía antecedentes alentadores: las primeras entregas de la telenovela la habían consolidado como uno de los productos más exitosos de la ex señal católica.

"Era una temporada que sabíamos que teníamos una muy difícil batalla. Estábamos compitiendo con una tremenda teleserie, que tenía un público cautivo de hace mucho tiempo, no era fácil entrar en ese escenario, pero siempre Soltera... ha tenido un grupo de fanáticos", analiza la actriz Lorena Bosch, quien fue parte de las tres temporadas.

Su inicio fue bueno. Al mes promediaba 12,3 puntos de sintonía. Pero el impulso no duró mucho, porque en abril, cuando se hicieron públicas las denuncias de abuso y acoso sexual contra su director Herval Abreu, las cifras comenzaron a caer.

A esas alturas, Abreu ya estaba fuera de la señal de Luksic, pero su nombre seguía ligado a la producción dramática, por lo que fue retirado de los créditos. Eso mientras la teleserie solo descendía en audiencia y pasaba a ser la nocturna menos vista de la historia de Canal 13. Durante mayo, la ficción marcó 8,8 puntos, y al mes siguiente, 7,2.

El pasado domingo, la actriz Susana Hidalgo, que se sumó a la historia en esta tercera parte, aseguró en La Tercera: "creo que todo influye, es muy complejo lo que pasa. El que lo quiera ver, que lo vea, y el que no quiere, que no lo vea. Si encuentran que lo que hizo Herval fue terrible, y hay que castigarlo, también está bien".

Soltera otra vez 3 finaliza mañana con un promedio de 9 puntos de rating, mientras que su primera parte, en 2012, fue todo un éxito al lograr 26,8. Y el segundo ciclo, en tanto, consiguió 18,9. O sea, su tercera parte marcó el declive del fenómeno. En los últimos meses, su desarrollo en pantalla se veía como una suerte de agonía. Entre su equipo, y al interior del propio canal, existe una sensación de alivio por el término de la producción. Y, por consecuencia, se descarta una cuarta parte.

"Mi humilde experiencia como escritor es que no hay una ciencia exacta en las teleseries. Uno apuesta por una historia que cree que puede convocar, pero siempre hay incertidumbre. Muchas cosas influyeron en este caso, como lo de Herval (Abreu) y Paz (Bascuñán), pero no tendría cómo afirmar que eso fue lo que determinó que la gente no la viera", explica Patricio Heim, uno de los guionistas de la ficción. La encargada de ir en busca de la audiencia perdida en el prime será Pacto de sangre, la teleserie que debuta este próximo lunes 24.