SEÑOR DIRECTOR:

Es una nueva conmemoración por el Día Internacional de la Mujer y mantenemos la urgencia de abordar el déficit de cobertura en educación parvularia y su impacto en la participación de las mujeres en el mercado laboral. En un escenario en que la crisis de los cuidados es un diagnóstico general de las políticas públicas, cabe preguntarnos cómo se integra esta dimensión de manera orgánica bajo un relato político y técnico común.

La educación inicial no solo es vital para el desarrollo integral de los niños y niñas, sino que también desempeña un papel crucial en la equidad de género y la economía. El acceso insuficiente a servicios de cuidado infantil afecta en gran medida los ingresos de las mujeres, quienes aportan un 25,6% del PIB, a través del trabajo doméstico no remunerado, según estimaciones del Banco Central (2020).

Es evidente que el déficit de cobertura en educación parvularia contribuye a la “crisis de los cuidados”, donde las mujeres asumen una carga desproporcionada de trabajo no remunerado, limitando su participación en la fuerza laboral y perpetuando la brecha de género en el mercado laboral.

A pesar de los compromisos gubernamentales para aumentar la oferta de educación inicial, las acciones concretas aún son insuficientes. Urge implementar medidas que garanticen la accesibilidad y calidad de los servicios de cuidado infantil, como parte integral de la política pública de equidad de género y desarrollo económico.

Es hora de priorizar la inversión en educación inicial como una estrategia fundamental para la autonomía económica de las mujeres y el desarrollo de una sociedad más justa e inclusiva.

Evelyn Sánchez A.

Directora Ejecutiva

Corporación para la Infancia de Santiago