El presidente de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), Juan Armando Vicuña, mostró su malestar al conocerse las conversaciones de WhatsApp que fueron parte de los argumentos para detener a Fundamenta y su proyecto “Egaña Comunidad Sustentable” en Ñuñoa, y podría dar paso a nuevas acciones legales por parte de la firma.

“Deja en evidencia cómo se usó una ideología política para detener un proyecto que ha cumplido con toda la normativa exigida por la ley. Sin argumentos técnicos, un grupo de funcionarios públicos recién asumidos entregó una resolución sin sustento que, entre otras cosas, dejó a 1.500 trabajadores desempleados”, dijo Vicuña por medio de un comunicado.

Desde la CChC también precisan que su malestar está centrado contra la autoridades involucaradas en la tramitación que paralizó el proyecto de Fundamenta: la delegada presidencial de la Región Metropolitana, Constanza Martínez; el seremi de Transportes, Roberto Santa Cruz; y la seremi del Medio Ambiente, Sonia Reyes.

La iniciativa en cuestión considera una inversión de US$300 millones y está a la espera de un último pronunciamiento de la Corte Suprema para reactivar sus obras paralizadas desde el 18 de abril de este año.

“Quisiera creer que esta suerte de colusión de los seremis es un hecho aislado. Por lo mismo, es importante que sea investigada, y si amerita, sancionada”, agregó Vicuña en torno a las conversaciones dada a conocer por PULSO.

Además, el gremio de la construcción aprovechó la instancia para también hacer un llamado a la forma en que se transmiten los permisos necesarios para realización de obras de gran envergadura en Chile.

“Esta revelación nos hace reflexionar sobre cómo estamos haciendo las cosas. Es indispensable encauzar este tipo de decisiones en especialistas técnicos, con conocimientos en las temáticas que se evalúan. Es la única manera de evitar decisiones arbitrarias que debiliten la institucionalidad y nos lleven a la corrupción”, concluyó el presidente de la CChC.