Tiene 22 años, nació en Buenos Aires y el 30 de agosto de 2021 debutó en River Plate. ¿Su nombre? Felipe Salomoni, el primer refuerzo de Universidad de Chile en este mercado invernal.

La llegada del futbolista transandino se gesta por la necesidad de Gustavo Álvarez de tener una alternativa para la banda izquierda, pues el ‘Tucu’ Sepúlveda es seguido por el fútbol brasileño y lo más probable que sea vendido. Además, Antonio Díaz -el otro lateral- no ha logrado convencer al adiestrador de los estudiantiles y se abrió una plaza de extranjero gracias a la salida de Fabricio Formiliano.

“Estoy muy feliz. Es un club grande, donde vamos a pelear por torneos y copas. Salir a ganar cada partido es lo que más me motiva. Voy a dejar todo e intentar llevar al equipo hacia adelante”, aseguró el deportista en entrevista con el club.

Salomoni se integró inmediatamente al entrenamiento del primer equipo, pero no podrá jugar ante Unión ni ante Colo Colo, pues son partidos pendientes de la primera rueda y él estará habilitado para la segunda parte de la Liga de Primera.

La enfermedad que retrasó la carrera del nuevo refuerzo de la U

Salomoni llegará al Centro Deportivo Azul directamente desde los Emiratos Árabes. Allí defendía la camiseta del Al Ain y aunque sumó 14 partidos en la máxima categoría, no logró quedarse con el puesto de titular (soloseis veces ingresó desde el primer minuto).

Por lo mismo, los arábicos rechazaron la oferta de comprar la totalidad del pase del jugador y he aquí el dato curioso: el 70% de la carta pertenece a Guaraní, el rival de Universidad de Chile en la Copa Sudamericana, pero que cede al jugador pues pasan por una delicada situación económica.

Llega en calidad de préstamo y con la idea de que se revalorice en el mercado chileno, pues su carrera prometía cuando estaba en River y una extraña enfermedad retrasó su explosión. En septiembre de 2022 y cuando era titular en la reserva de los Millonarios, el joven sufrió del síndrome de Paget Von Schrötter o también conocido como “la trombosis del esfuerzo”.

Dicha dolencia es una extraña afección vascular de la vena subclavia, la cual se produce por la compresión entre la clavícula y la primera costilla. ¿Resultado? Varios meses sin jugar y un tratamiento especial, pues podía entrenar pero sin someterse a ningún tipo de roce.

Su recuperación implicaba un estricto tratamiento con anticoagulantes y seguimiento exhaustivo de parte de los doctores tratantes, por lo que se cayó el préstamo que River negociaba con Colón de Santa Fe y no pudo continuar su carrera al otro de lado de la cordillera. Finalmente, logró volver a las canchas y fue ahí que emigró al Cacique paraguayo, donde sumó 16 partidos y 13 titularidades el 2023.