El 9 de junio de 1835, en la ciudad de Santiago, capital de la joven república de Chile, nació José Ramón Barros Luco. Hijo de aristócratas venidos a menos, estudió leyes, se dejó crecer el bigote y luego, desde la administración pública, trazó una larga trayectoria política. Fue elegido ocho veces diputado, dos veces senador y ministro en dieciséis ocasiones. Participó del gobierno de Balmaceda pero también lideró al bando que lo venció en la guerra civil de 1891. Asumió como Presidente en 1910, y en su gobierno se construyó el Archivo Nacional, la Escuela de Aviación, el Puerto de San Antonio y el Ferrocarril Arica-La Paz, entre otras obras. También fundó la ciudad de Puerto Natales.

Pero su mayor legado no es un edificio, tampoco una ley, sino una obra todavía más relevante para la consolidación de nuestra frágil identidad chilena. Es un pan. Un pan con queso y carne. Pero solo como al Presidente Barros Luco se le pudo haber ocurrido: con la carne laminada y cocinada a la plancha, el queso fundido ahí mismo, y así junto puesto entre una marraqueta. Un señor Barros Luco.

Por eso, el 9 de junio, día en que don Ramón celebraba su cumpleaños, se le rinde homenaje a su opera maestra, el sánguche más chileno de todos: el barros luco. A continuación, seis tradicionales lugares de Santiago que lo preparaban como dicta la tradición: simple y a la plancha.

Confitería Torres

La lista de lugares para festejar el Día del Barros Luco 2025 no puede partir con otro que la Confitería Torres, el local donde nació este clásico sándwich chileno.

La leyenda, bien sabida a estas alturas, cuenta que Ramón Barros Luco, presidente de Chile entre 1910 y 1915, era un fiel parroquiano de la Confitería, en la cual solía pedir de almuerzo un emparedado de delgados cortes de carne con queso fundido.

El sándwich se hizo popular y la Confitería Torres lo puso en su carta con el apellido del presidente. Desde entonces, en todo Chile se conoce como Barros Luco.

Hoy sigue siendo el favorito de muchos en este distinguido restaurant, tanto en su local original de la Alameda con Dieciocho, en el Palacio Iñiguez, como en las sucursales de Isidora Goyenechea y el Centro Cultural La Moneda.

En la carta aparece como Presidente Barros Luco ($11.200), y se hace con filete, blandito y jugoso, queso Colún fundido, el de siempre, y marraqueta que se hornea en el local del Las Condes. Tan sencillo como perfecto.

Lo puedes acompañar con un té, una cerveza, una copa de vino tinto o, si te animas, con una cola de mono en temporada.

• 📍Dónde: Alameda 1570, Santiago
• 📅 Horario: lunes a viernes, de 8 AM a 8 PM

Fuente Mardoqueo

En calle Libertad, a pasos de la Plaza del Roto Chileno, se encuentra la Fuente Mardoqueo, la sanguchería más emblemática del barrio Yungay.

Un local famoso por sus inmensos sánguches pero, en especial, por su lomito bávaro: una pulpa de cerdo cortada en lonjas que se hace según la receta secreta de los abuelos del dueño, Gustavo Peñafiel.

Pero en Fuente Mardoqueo, por supuesto, también tienen un barros luco ($9.600, tamaño “chico”), con churrasco a la plancha, bien jugoso, y queso fundido.

Si vas con mucha hambre mejor pide directo el barros luco “normal” ($11.500), que en realidad es enorme: lleva 300 gramos de carne y 110 gramos de queso. Alcanza perfectamente para dos personas moderadas.

Además de lomito y churrasco, tienen ave, atún y hamburguesas, todas personalizables con los agregados que tú quieras. Estas delicias las puedes encontrar tanto en el local original de barrio Yungay como en las sucursales de Las Condes (Roger de Flor 2894), Av. Bilbao 2639 y San Joaquín (Vicuña Mackenna 3207).

• 📍Dónde: Libertad 551, Santiago
• 📅 Horario: lunes a domingo, de 12 PM a 11 PM

Antigua Fuente

Otra clásica sanguchería chilena que festejará el Día del Barros Luco es la Antigua Fuente. Esta tradicional fuente de soda cercana de Plaza Italia, que hasta hace poco era conocida como Fuente Alemana, cambió su nombre hace un tiempo y abrió nuevas sucursales.

Pese a esta renovación, mantiene intacta la calidad y los sabores que la convirtieron en un símbolo de la sanguchería nacional con más de 50 años de historia.

Es un lugar imprescindible para extranjeros y turistas que no conocen los sánguches chilenos, porque sus lomitos, fricandelas, completos o su clásico rumano son la mejor demostración de tradición, sabor y artesanía, con una calidad que no falla.

Esa excelencia la replican también en el MUT, donde hace muy pocos meses instalaron la primera sucursal de la Antigua Fuente. Con algunas de las mismas cocineras que llevan décadas trabajando y atendiendo en la Alameda, ahora es posible gozar de sus delicados e inmensos sánguches en este fenomenal patio de comidas junto al metro Tobalaba.

Como el barros luco, que viene con jugosas láminas de churrasco, queso fundido y el pan amasado fresquito, que se hornea en su propia panadería.

El mismo sanguchito que hoy tendrá un 30% descuento si lo pides por delivery a través de Uber Eats.

• 📍Dónde: Alameda 58, Santiago
• 📅 Horario: lunes a sábado, de 11 AM a 9:30 PM

La Terraza

Uno de los regresos más celebrados post pandemia fue el de La Terraza, la querida fuente soda de Av. Vicuña Mackenna que, por su cercanía a Plaza Italia, fue uno de los locales más afectados por el estallido social.

Pero volvió renovada, con un look más moderno y luces de neón, aunque con la misma calidad, sabor y cariño de siempre.

Lo puedes comprobar en este Día del Barros Luco probando su versión de este sánguche, que se prepara a la vista de todos, detrás de la barra, sobre una plancha que está encendida todo el día.

Eso sí, en La Terraza hay más de un barros luco. Está el tradicional, de churrasco ($8.490), pero también de lomito o ave. También está el luco italiano ($9.890), con láminas de churrasco, mucho queso fundido, palta y mayo de la casa.

• 📍Dónde: Vicuña Mackenna 24, Providencia
• 📅 Horario: lunes a sábado, de 11:30 AM a 12 AM; domingos, de 12 PM a 5 PM

Lomit’s

Un bastión de la sanguchería chilena, que este año cumple cinco décadas, es el Lomit’s. Su estilo tradicional, de mesas con mantel y mozos con humita, resiste en plena avenida Providencia con su larga carta de platos típicos —como palta reina, escalopas, perniles o lenguas— y una todavía más extensa de sánguches.

Ahí, entre mechadas, churrascos, gordas y chemilicos brilla el barros luco ($7.920), quizá el mejor de este sector de la ciudad. Consiste de varios finos churrascos de posta negra, bastante queso mantecoso fundido en la plancha y —si se lo pide en frica (porque también puede ser en molde)— de un delicioso pan de la panadería Las Rosas Chicas.

Todo se arma en la plancha, espectáculo que se puede admirar si uno consigue un asiento en la barra, tarea difícil dada la cantidad de comensales que llegan todos los días a buscar una pausa en el Lomit’s.

También se puede pedir con carne de ave, lomito o mechada. Cualquiera es rico pero el original es un poema.

• 📍Dónde: Av. Providencia 1980, Providencia
• 📅 Horario: lunes a sábado, de 10 AM a 11 PM

Da Dino

Un perfil más bajo que el resto, pero no por eso menos impecable, es el que tiene Da Dino, un local más famoso por sus pizzas de estilo chileno —masa gruesa y mucho relleno— pero cuyos sánguches no desentonan.

Su barros luco ($9.400) es todo lo que uno le pide a este plato: un churrasco que se siente —es un poco más grueso que lo tradicional— pero sin dejar de ser blandito; una generosa porción de queso, el mismo de sus pizzas, pero fundido en la plancha; y un pan frica perfecto, que hacen en el mismo restorán.

Lo tienen disponible en sus tres locales: en el más grande, de Apoquindo con Golda Meir, muy cerca del metro Alcántara; en la sucursal exprés, en el SubCentro de Escuela Militar; o en la casa matriz, en el pasaje Tenderini, pleno centro de Santiago.

• 📍Dónde: Alameda 737, Santiago
• 📅 Horario: lunes a viernes, de 9:30 AM a 6 PM