Mundo

Entre fraudes, influencia y poder: ¿Cómo se hizo rico Jeffrey Epstein?

Dueño de islas y propiedades de lujo, el origen de la fortuna del inversionista ha sido durante mucho tiempo un misterio. Pero una investigación reciente encontró que el delincuente sexual convicto amasó su riqueza mediante estafas, robos y mentiras.

Entre fraudes, influencia y poder: ¿Cómo se hizo rico Jeffrey Epstein? En la imagen, Epstein comparece ante el tribunal en West Palm Beach, Florida, el 30 de julio de 2008. Foto: Archivo Uma Sanghvi

Acusado de abusar de docenas de adolescentes antes de morir por suicidio en una prisión federal en 2019, siempre había sido una incógnita cómo Jeffrey Epstein, un multimillonario con conexiones políticas que nunca se graduó de la universidad, terminó socializando con una variedad de figuras públicas importantes, desde expresidentes estadounidenses y magnates del software hasta miembros de la familia real británica.

Cuando el financiero caído en desgracia fue encontrado muerto a los 66 años en su celda de Manhattan en agosto de 2019, mientras esperaba juicio por tráfico sexual, un expediente penal calculó su patrimonio neto en aproximadamente 560 millones de dólares. Los bienes de Epstein también incluían varias propiedades de lujo.

Esta foto del 28 de marzo de 2017, proporcionada por el Registro de Delincuentes Sexuales del Estado de Nueva York, muestra a Jeffrey Epstein. Foto: Archivo Uncredited

Epstein poseía una mansión señorial en el Upper East Side de Manhattan, valorada en más de 50 millones de dólares. También era propietario de una mansión en Palm Beach, Florida, valorada en unos 12 millones de dólares; un rancho en Nuevo México avaluado en poco más de 17 millones de dólares; y un departamento en París con un valor estimado de 8,6 millones de dólares.

Sus dos islas privadas en el Caribe, Great St. James y Little St. James, estaban valoradas en 86 millones de dólares tras su muerte, pero fueron adquiridas por 60 millones de dólares en 2023 por el multimillonario Stephen Deckoff, fundador de la firma de inversión alternativa Black Diamond Capital Management. Epstein también poseía un jet privado.

Una investigación del diario The New York Times para determinar cómo Epstein amasó su fortuna examinó minuciosamente archivos privados, entrevistas inéditas, diarios, cartas, correos electrónicos, álbumes de fotos y páginas de registros. Asimismo, contactó a docenas de colegas, amigos, conocidos y víctimas comerciales y sexuales de Epstein. Éstas son las seis conclusiones que publicó el diario neoyorquino este martes.

La mansión de Epstein en Palm Beach, Florida. Foto: X

Golpes de suerte en Wall Street

Epstein estuvo a punto de perder su puesto de profesor en la Escuela Dalton cuando conoció a un padre que le presentó a Ace Greenberg, el futuro director ejecutivo de Bear Stearns. Greenberg fue mentor de Epstein a pesar de sus malas prácticas, que incluían afirmar falsamente que tenía un título universitario, malversar cuentas de gastos y darle a su novia acceso privilegiado a inversiones. A pesar de esto, Bear Stearns le dio repetidas segundas oportunidades.

Aportes de Bear Stearns

Tras la salida de Epstein de Bear Stearns, la compañía de banca de inversión, un exrepresentante le enviaba constantemente clientes y mujeres jóvenes, algunas de las cuales eran asistentes. Estos encuentros a veces derivaban en encuentros casuales y relaciones románticas. Patricia Schmidt declaró que tanto el representante como Epstein la utilizaron como herramienta de presión.

Suzanne Ircha, quien posteriormente se convirtió en amiga íntima de Melania Trump, también estuvo involucrada. Epstein aprovechó su tiempo en Bear Stearns y sus estrechas relaciones con los ejecutivos para reforzar su legitimidad ante clientes potenciales y funcionarios del gobierno durante décadas. Ni la relación de Schmidt ni la de Ircha con Epstein se había revelado previamente.

Primeras estafas

Tras dejar Bear Stearns, el magnate continuó con su patrón de engaños, como revelaron las transcripciones de entrevistas recientemente obtenidas por el Times. Sus primeros mentores, Douglas Leese y Michael Stroll, lo acusaron de malversación de fondos y fugarse con dinero de inversiones. Epstein también habría llevado a cabo planes para manipular los precios de las acciones, solicitando fondos a los inversores y luego desapareciendo con el dinero, lo que le permitió acumular riqueza e impresionar a futuros objetivos.

Cartel con una fotografía de Jeffrey Epstein, acusado de tráfico sexual de menores y conspiración para cometer tráfico sexual de menores, en Nueva York, el 8 de julio de 2019. Foto: Archivo SHANNON STAPLETON

Dinero escondido en Islas Caimán

A principios de la década de 1980, Epstein logró un gran avance al rastrear el dinero desaparecido hasta las Islas Caimán tras el colapso de Drysdale Securities, la firma de corretajes. Contratado por familias españolas, incluyendo a los Obregón, Epstein, con la ayuda del exfiscal federal Bob Gold, dedicó más de un año a rastrear los fondos. Hasta que el delincuente sexual convicto concluyó que el dinero estaba oculto en una sucursal de un banco canadiense en las Islas Caimán. Epstein recibió una recompensa sustancial por recuperar el dinero, lo cual, junto con otras iniciativas, contribuyó a que se convirtiera en millonario.

Asociación exagerada

Epstein exageró la cercanía de su relación con David Rockefeller, expresidente y director ejecutivo de Chase Manhattan Corporation, a menudo para mejorar su reputación y acceder a círculos influyentes. Usando al banquero como tarjeta de presentación, consiguió donaciones de la Fundación Rockefeller a organizaciones como la Universidad Rockefeller y la Comisión Trilateral.

Epstein también recibió a Rockefeller en su mansión para conversar. A pesar de las afirmaciones del inversionista de haber administrado el dinero de la familia Rockefeller, esto parece ser falso, aunque utilizó el nombre del clan para impresionar a personas e instituciones poderosas.

El prestamista de dinero y reputación

Les Wexner, el multimillonario responsable de marcas como Limited y Victoria’s Secret, fue probablemente el mayor benefactor de Epstein, aportándole no solo dinero, sino también credibilidad y credenciales. El inversionista aprovechó su asociación con Wexner para forjar relaciones con hombres poderosos, como Ken Lipper, otro corredor de bolsa, y utilizó el dinero de Wexner para ayudar a personas como el reconocido abogado Alan Dershowitz, quien después le devolvió la mano y se convirtió en un defensor clave durante el caso Epstein.

Lee también:

Más sobre:Jeffrey EpsteinMillonarioMelania TrumpCaso EpsteinNueva YorkLes WexnerWall StreetDonald TrumpManhattanDavid RockefellerMundo

COMENTARIOS

Para comentar este artículo debes ser suscriptor.

Plan digital + LT Beneficios por 3 meses

Cobertura completa, análisis y beneficios para todo el año 🔍🎁$3.990/mes SUSCRÍBETE