Nacional

Unicef cifra en $ 595 mil el costo promedio mensual para criar a un hijo en Chile

De acuerdo al estudio encargado por el Ministerio de la Mujer y realizado por el organismo internacional, este valor se divide en $ 383.267 en productos y servicios como alimentación, transporte, vestuario y educación, y $ 211.616 por el tiempo de cuidado no remunerado que implica la crianza. Se trata de una cifra referencial, ya que puede variar según la edad de los hijos y la composición del hogar.

¿Cuánto gastan en promedio las familias en criar a sus hijos? Esa fue la pregunta que el Ministerio de la Mujer y la Equidad de Género le encargó responder a Unicef mediante un estudio que, por primera vez en Chile, permite estimar este gasto a través de la elaboración de la Canasta de Crianza. En el proceso también participaron equipos técnicos del Ministerio de Desarrollo Social y Familia, de Economía y del Instituto Nacional de Estadísticas (INE).

El objetivo era calcular este costo considerando no solo el desembolso en bienes y servicios, sino también el tiempo no remunerado que las familias destinan al cuidado de niños, niñas y adolescentes (NNA).

Así, el estudio concluyó que, en promedio, la crianza alcanza un costo mensual de $ 594.882 (a marzo de 2025). De esa cifra, $ 383.267 corresponden a productos y servicios, como alimentación, salud, vestuario, educación, transporte y recreación, mientras que $ 211.616 reflejan el valor económico del trabajo doméstico y de cuidado no remunerado que realizan las familias. Eso sí, desde el ministerio hacen el alcance que esta suma se trata de una media referencial, ya que no sustituye estimaciones ajustadas según edad, tamaño del hogar o estructura familiar.

En ese contexto, el informe detalla que criar a un niño implica un aumento significativo en el presupuesto familiar: dependiendo de la edad, representa entre un 27% y un 31% más de gasto total respecto de un hogar sin niños. Además, el primer hijo concentra la mayor parte del gasto, mientras que los siguientes requieren una inversión menor, ya que muchos costos pueden compartirse.

La titular de la Mujer, Antonia Orellana, afirma que las conclusiones de esta investigación tienen varias ventajas: “Ofrece una herramienta técnica y objetiva fundamental ante tribunales para estimar el costo real de criar a un hijo o hija, lo que se podría transformar en una referencia a considerar a la hora de fijar la pensión de alimentos”.

En ese sentido, desde la cartera añaden que conocer la Canasta de Crianza también es importante porque visibiliza el valor económico del tiempo de cuidado no remunerado que realizan especialmente las mujeres, fortalece la protección social y refuerza la visión de la crianza como inversión social.

Además, la ministra añade que “gracias a los mecanismos existentes de protección social muchos de los costos directos de crianza hoy son derechos cubiertos por el Estado, como en educación, en salud, entre otros. Con este instrumento se pueden diseñar con mayor precisión las transferencias y servicios que alivien esa carga, especialmente en contextos de pobreza y vulnerabilidad”.

El estudio también muestra que la composición del costo de crianza varía según la edad del niño o adolescente. Durante el primer año de vida más de la mitad del gasto corresponde al tiempo de cuidado. Entre los 1 y 3 años esta proporción disminuye, y entre los 4 y 13 años el costo en bienes y servicios duplica al valor del tiempo, debido a que los niños están en edad escolar y requieren menos supervisión directa en el hogar, pero más recursos en alimentación, educación y transporte.

Finalmente, en la adolescencia (14 a 17 años), el tiempo de cuidado representa solo un 14% del costo total, predominando los gastos en bienes y servicios. En resumen, a medida que los hijos crecen, el gasto monetario aumenta en comparación con el tiempo dedicado, mientras que en la primera infancia el valor del cuidado representa casi la mitad del costo total.

Bárbara Gutiérrez, académica de la Escuela de Obstetricia y Neonatología de la UDP, afirma que esta información “es útil para ayudar a las familias a planificar de manera más realista los costos asociados al nacimiento de un hijo, a tomar decisiones más informadas sobre derechos y beneficios laborales”.

Y añade que “otro aspecto relevante es generar conciencia sobre la corresponsabilidad parental, ya que el estudio muestra que criar no tiene únicamente costos monetarios directos, sino también el costo del tiempo que se dedica a la crianza, que en nuestra sociedad está vinculado mayoritariamente a la mujer, lo que refuerza la necesidad de una distribución de roles más equitativa entre madres, padres y cuidadores”.

Por otro lado, la académica también explica que en Chile la tendencia en los últimos años refleja un aumento en el costo de la crianza y que dentro de los factores que están detrás de este fenómeno está el incremento en el costo de la vida, habiendo un alza sostenida en el precio de alimentos, transporte, vivienda y otros bienes y servicios básicos para las familias.

Precisamente, este estudio se presenta en un momento clave: según las más recientes Estadísticas Vitales del Instituto Nacional de Estadísticas (INE) la tasa global de fecundidad en Chile ha caído a 1,16 hijos por mujer, muy por debajo del nivel de reemplazo generacional (2,1). Y, de hecho, diversos expertos han señalado que el alto costo de la crianza es uno de los factores que desincentivan la decisión de tener hijos.

Más sobre:HijosCrianzaUnicefMinisterio de la MujerLabores de cuidado

COMENTARIOS

Para comentar este artículo debes ser suscriptor.

Promoción 75 aniversario: suscríbete hasta el 2 de octubre y participa del sorteo por 2 pasajes a B.Aires ✈️

Plan digital + LT Beneficios$1.300/mes SUSCRÍBETE