SEÑOR DIRECTOR:
Es absolutamente cierto y penoso lo que establece Regina Varetto en su reciente carta titulada “¿Por qué no entienden lo que leen?”, en la que plantea las deficiencias de una PAES Lenguaje admisión 2023 que deja de lado los textos literarios, aun cuando en su temario lo establece, dándole cabida a textos inocuos.
La lectura de la literatura es un centro de expansión cultural que permite el desarrollo de la imaginación y la creatividad, es una fuente generadora de pensamiento crítico en los lectores y que, también, aporta de manera esencial a la adquisición de vocabulario y a la organización de ideas del pensamiento. Además, según estudios de la neurociencia, sería una forma de desarrollar las habilidades sociales esenciales para que cualquier individuo pueda enfrentar el siglo XXI.
Por ello, es apremiante que nuestro sistema educativo de una vez por todas le dé un lugar primordial a esta área del lenguaje. No es baladí que nuestros estudiantes, incluso los mejores, sean considerados deficientes al compararlos en la prueba PISA con otros en el mundo. Ha llegado el momento de trabajar con esas diferencias sustanciales en nuestra educación, incluyendo la lectura comprensiva de los autores clásicos y los que no son tanto, pero colocando la lectura de la literatura como foco en las clases de Lenguaje y con ello, escuchar e imitar las buenas experiencias que son el Bachillerato Internacional, currículo europeo de algunos colegios en el mundo, que a través del estudio acabado de la literatura no solo desarrolla todos los ejes (lectura, escritura, oralidad e investigación) de los alumnos que lo estudian, sino que, además, los prepara para ser reflexivos, críticos del texto que reciben, responsables del mensaje que emiten y con desarrollo de herramientas de pensamiento en un entorno multicultural que les permiten moverse eficazmente en el mundo de hoy.
Susana Astudillo M.
Profesora de Lenguaje
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