11 de septiembre: Piñera opta por acto austero y sin presencia de partidos

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En 2013, Piñera lideró en La Moneda la conmemoración de los 40 años del golpe de Estado.

En La Moneda explican que decidieron realizar algo "sencillo y sobrio", donde el Mandatario realizará un llamado a la reflexión, incluyendo una mirada de futuro.


Al igual como en el último año de su primer gobierno, el Presidente Sebastián Piñera participará este martes, a las 9.00, de una ceremonia ecuménica para recordar los 45 años del golpe de Estado. Eso sí, a diferencia de 2013 -cuando se conmemoraron 40 años desde el quiebre de la democracia-, ahora el Mandatario optó por invitar solamente a sus ministros y funcionarios de Palacio, dejando fuera a los partidos políticos del oficialismo y de la oposición.

En en el Ejecutivo dicen que por primera vez -considerando este año y los cuatro de la primera administración de Piñera- se excluye a las coaliciones políticas, y explican que el objetivo es que esta jornada sea un día de "reflexión" y que, por ende lo mejor era acompañarlo de un acto más "sencillo y sobrio".

Al acto ecuménico, que se realizará en el Patio de Las Camelias, el jefe de Estado asistirá acompañado de la primera dama, Cecilia Morel. Posteriormente, Piñera realizará un discurso, que estuvo afinando hoy en la tarde junto al grupo de asesores del segundo piso de La Moneda, encabezado por Cristián Larroulet.

Según explican en el Ejecutivo, su intervención apuntará a realizar una reflexión de los hechos que llevaron al golpe militar y las violaciones a los derechos humanos ocurridas durante el régimen de Augusto Pinochet. Asimismo, haría un llamado a que los hechos no se vuelvan a repetir, incluyendo también una mirada de futuro y más amplia respecto a los derechos humanos, por ejemplo, en materia de infancia.

En Palacio añaden que la alocución de Piñera también iría en línea con lo que planteó el domingo en el especial de La Tercera por la conmemoración del 11 de septiembre. Ahí, el Mandatario hizo una reflexión y sostuvo que es "bueno aprender lecciones de los errores del pasado (…); estoy seguro de que la centroderecha también aprendió la lección de lo importante que es el compromiso total y absoluto con el respeto a los derechos humanos".

Durante 2013, Piñera -previo a la ceremonia que realizó en ese entonces en La Moneda- emitió en este diario las comentadas palabras respecto de que durante el régimen militar "hubo muchos que fueron cómplices pasivos", lo que generó duras críticas en su entonces coalición de gobierno y la valoración de algunos dirigentes de la centroizquierda. A los días, el jefe de Estado realizó el acto en La Moneda, que contó con la participación de abanderados presidenciales de esa época, pero del que se restaron varios personeros de la oposición debido a que participaron de un acto paralelo.

A raíz de esto último, en el oficialismo dicen que otra de las razones por la que el gobierno optó este año por no invitar a los partidos es debido a que el presidente del Senado, Carlos Montes (PS), y la Fundación Salvador Allende también realizarán un acto de conmemoración, casi a la misma hora.

Así, agregan que si se invitaba a la oposición se podría repetir que algunos personeros se resten y que se termine transformando en un "acto de división". Esto, agregan, considerando que el gobierno ha buscado instalar la idea de unidad.

Hoy, el tema se abordó durante el comité político de La Moneda, encuentro en el que los ministros explicaron a los principales dirigentes de Chile Vamos las razones de por qué se optó por un "acto sobrio".

El viernes pasado, los presidentes de RN y de la UDI, Mario Desbordes y Jacqueline van Rysselberghe, respectivamente, fueron avisados que los partidos no serían invitados al acto.

Si bien públicamente Chile Vamos respaldó la decisión del gobierno, en privado algunos manifestaron sus reparos. Por ejemplo, Evópoli transmitió que era partidario de hacer un "acto republicano" con todos los sectores.

Además, en el bloque apuntaron sus críticas a la ceremonia organizada por el senador Montes, argumentando, entre otras materias, que es una "apología al gobierno del expresidente Allende".

"La gestión que hizo él (Montes), anticipándose a alguna actividad en La Moneda, enredó la posibilidad de hacer algo más amplio acá, porque nuevamente habríamos tenido la imagen de un sector en un lado y el otro sector en otro, lo que es bastante poco deseable", dijo Desbordes.

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