Invitación de Boric a La Moneda enreda a Chile Vamos en medio de diferencias internas y rol de Piñera

“Una consulta: La Moneda citó a Chile Vamos a reunión mañana (jueves). ¿Van a concurrir si aún no hay disculpas por ofensas a don Sergio Onofre Jarpa Reyes?”. Esa fue la pregunta que hizo, este martes, uno de los militantes de Renovación Nacional en el grupo de WhatsApp denominado como “Los 251 de RN”.

Aunque en esa instancia no hubo respuesta a su pregunta, ese mismo debate se replicó durante la jornada en otros grupos de mensajería de texto de la bancada de diputados del mismo partido. “Boric nos golpea con Jarpa y nos invita, hay que ser masoquista para ir”, comentaban en privado algunos parlamentarios de RN.

Esto, luego de que el lunes La Moneda -a través de la ministra del Interior, Carolina Tohá- hiciera público que iniciaron una ronda de contactos con la oposición para sostener encuentros con los presidentes de partidos, con el objetivo de viabilizar las iniciativas que está impulsando el Ejecutivo, entre ellas, pensiones y pacto fiscal.

La cita fue convocada para este jueves en Palacio, en cuyas gestiones estuvo directamente involucrado el Presidente Gabriel Boric, quien contactó a los timoneles de Chile Vamos y, además, invitó al exmandatario Sebastián Piñera a viajar junto a él para el cambio de mando en Paraguay, instancia en la que le pidió interceder para facilitar los diálogos y los acuerdos con su sector político.

Sin embargo, la movida de Boric terminó enredando y tensionando a la derecha, la que tuvo que debatir el asunto para fijar una postura. Primero, porque los sectores más duros de Renovación Nacional comenzaron a transmitir que no es momento de sentarse a conversar con el Mandatario, sobre todo si emplazó, en duros términos, agregan, a uno de los fundadores del partido.

Esto, haciendo alusión a los dichos del Jefe de Estado, quien la semana pasada sostuvo -en el marco de una actividad en el Museo de la Memoria, de cara a una nueva conmemoración de los 50 años del Golpe- que “desgraciadamente, gente como Sergio Onofre Jarpa terminaron sus días impunes, pese a todas las tropelías que cometieron” cuando fue ministro del Interior durante el régimen de Pinochet.

El episodio provocó una profunda molestia en RN, quienes pidieron que el Mandatario se disculpara. Sin embargo, eso no ha ocurrido, por lo que varios parlamentarios se inclinaban para que el presidente del partido, Francisco Chahuán, no asista al encuentro.

En medio de la molestia de ese partido es que en el bloque se conversó la idea de hacer un gesto como Chile Vamos respecto de las declaraciones de Boric sobre Onofre Jarpa. Así, elaboraron una declaración conjunta que difundieron la noche del lunes, rechazando los dichos del Mandatario.

En RN, además, pesan otros factores que complican participar de la cita, entre ellos, que el mandato de la actual mesa liderada por Chahuán y el secretario general, Diego Schalper, está llegando a su fin, por lo que los interlocutores con el Ejecutivo cambiarán y también el diseño para relacionarse con La Moneda.

Este fin de semana serán los comicios internos donde se medirán los senadores Rodrigo Galilea, Paulina Núñez y María José Gatica, quienes buscan la presidencia del partido. Al competir en tres listas, probablemente terminen en segunda vuelta, por lo que para la definición de la nueva mesa todavía faltan semanas.

“Ha habido una estrategia de agresión a la oposición con ocasión de la conmemoración de los 50 años, especialmente con RN, que ha sido el único que se ha mostrado más disponible al diálogo. El gobierno tiene que decidir: o conversamos o seguir marcando diferencias, agrediéndonos, pero las dos cosas no se pueden hacer”, sostuvo a este medio el jefe de bancada de RN, Frank Sauerbaum, quien previamente -a través de un video- señaló que tomarían una definición como sector respecto de si asistir o no a la reunión con Boric.

Así, de este martes, los principales dirigentes de Chile Vamos debatieron sobre si concurrir o no a la cita.

En la UDI si bien transmitieron desde la mañana que hay que ir al encuentro, el escenario para la colectividad liderada por el senador Javier Macaya tampoco es fácil. Previo a la renuncia de Giorgio Jackson del Ministerio de Desarrollo Social, fue el propio Macaya quien condicionó los diálogos con La Moneda a la salida del fundador de Revolución Democrática.

Por lo mismo, dicen en la UDI, hay una palabra que se debe cumplir y que sería más costoso, en este caso, restarse. El problema, eso sí, reconocen en el gremialismo es que en la militancia, en los sectores más duros, hay voces que impulsan la idea de no sentarse a conversar con el gobierno ni darle salida a la crisis que enfrentan a raíz del lío de platas por los cuestionados convenios entre fundaciones y reparticiones del Estado.

Por lo mismo, en su discurso, la UDI ahora está intentando instalar que no por sentarse a conversar van a aprobar las reformas. En esa misma línea es que el partido decidió retomar los diálogos, por ejemplo, en pensiones -instancia de la que se había restado previo a la salida de Jackson- y asistirá al encuentro de este miércoles de la mesa técnica encabezada por la ministra del Trabajo, Jeannette Jara.

En ese partido, además, les pesan las estrategias que adopte el Partido Republicano, colectividad -que se caracteriza por posiciones más duras- que se ha transformado en una amenaza electoral para la tienda que dirige Macaya.

Sobre la cita con Boric del jueves, la secretaria general del gremialismo, María José Hoffmann, se adelantó a una postura común del sector y durante la tarde confirmó la asistencia del partido. “Una vez más estamos disponibles al diálogo, pero el Presidente debe escuchar a los chilenos”, dijo a través de un video. Al encuentro concurrirá Hoffmann, porque Macaya se encuentra fuera de Chile y regresará al país el sábado.

En la derecha, en todo caso, son varios los que creen que hay materias que deben resolver durante esta administración, sobre todo, lo relativo a la reforma previsional. Esto, porque apuestan a ser gobierno en el próximo periodo, y si ese asunto continúa abierto -agregan- será un flanco constante con el que tendrán que lidiar.

Ese punto, de hecho, afirman algunos en la derecha, es el único incentivo para sentarse a conversar, ya que -reconocen en el sector- la militancia más dura empuja por no darle “salidas” al gobierno. Sobre todo, agregan, en un escenario en que Boric ha sido duro con la derecha y los ha emplazado en más de una ocasión.

Pese al sí de la UDI para asistir a la reunión con Boric, las dudas en los otros partidos de Chile Vamos persistieron durante la tarde.

En Evópoli, su presidenta, Gloria Hutt, según afirman en el sector, era de la idea de esperar hasta la próxima semana y no conceder un encuentro de inmediato.

Así, los principales dirigentes de los partidos se reunieron a las 20.00 de forma telemática para fijar una postura. Luego de discutir el asunto, según fuentes del sector, acordaron asistir todos los partidos como bloque.

“Hemos aceptado invitación del Presidente Gabriel Boric. Queremos escucharlo y plantearle que seguiremos persiguiendo cada una de las responsabilidades del caso Democracia Viva y convenios en general, donde confiamos que el gobierno esté en la vanguardia y no en la retaguardia”, publicó en sus redes sociales -tras la cita- el diputado Schalper.

Otro asunto que no pasó desapercibido en Chile Vamos es el rol que asumió el expresidente Sebastián Piñera, quien viajó con Boric al cambio de mando en Paraguay.

El exmandatario, tras la conversación que sostuvo con el Jefe de Estado en el avión presidencial, hizo un llamado a lograr acuerdos. “Chile tiene gravísimos problemas y la única forma verdadera de avanzar en las discusiones es con buen diálogo y buenos acuerdos”, dijo al respecto.

A varios en la derecha les incomodó que fuera Piñera quien asumiera un rol de liderazgo en el asunto en momentos en que los partidos de derecha han endurecido el tono con el Ejecutivo. En ese sentido, varios recalcan que esta es una materia que tienen que resolver las colectividades y no el exjefe de Estado.

Si bien algunos transmiten que los emplazamientos de Piñera ya no “pesan” lo mismo, no quieren enfrascarse en una discusión con él, sobre todo en momentos en que su figura, según sondeos de opinión, ha ido al alza.

El expresidente ha estado activo en los últimos días. No solo ha tenido múltiples encuentros con personeros del sector y llamados telefónicos, sino que también planteó su propia propuesta de una gran coalición que incluya al Partido Repúblicano, Chile Vamos, Amarillos y Demócratas. Una idea que, en todo caso, recibió un portazo.

En Chile Vamos, en todo caso, descartan que Piñera los contactara particularmente para instarlos a ir a la cita con Boric.

En todo caso, la convocatoria de La Moneda no solo provocó un debate interno en la derecha, sino que también generó reparos de otros sectores políticos. El diputado y presidente de la Cámara, Ricardo Cifuentes, manifestó, en su cuenta de X (antes Twitter), que “el gobierno no solo debe dialogar con la oposición para lograr acuerdos (...), sino que también con la Cámara de Diputados de manera institucional”.