La catástrofe de los edificios Kandinsky en Concón puso en evidencia la urbanización “extrema” en la costa y la falta de una Ley de Costas que se encuentra estancada en el Parlamento.
Josefa Zepeda
30 oct 2023 05:49 PM
La catástrofe de los edificios Kandinsky en Concón puso en evidencia la urbanización “extrema” en la costa y la falta de una Ley de Costas que se encuentra estancada en el Parlamento.
Antes de que el sector fuese poblado, la duna original de Concón y Viña del Mar, de 1.662 hectáreas, limitaba al norte con el río Aconcagua y al sur con el estero Reñaca. La compra de terrenos, en 1980, dio paso a la masiva construcción de edificios, que tuvo su boom en la década del 2010 y que según diversos estudios, ha disminuido su superficie (31 hectáreas en 12 años), altura (12 metros en 26 años) y volumen (un millón de toneladas en 9 años). Movimientos ambientalistas buscan detener la construcción de nuevos edificios y aumentar el área del santuario. En ambas comunas hay proyectos aprobados aún por construir.
La delegación presidencial regional de Valparaíso y Carabineros implementaron varias disposiciones para dar seguridad a los propietarios de los departamentos, varios de los cuales se vieron afectados por robos durante la última semana.
Una es contra la Dirección de Obras Municipales, por aprobar la construcción de edificios en las dunas. Otra, contra la municipalidad, el Ministerio de Obras Públicas y el Serviu, por su inacción ante el desplazamiento de una calle aledaña. La última es contra el MOP, por parte de una inmobiliaria. La empresa acusa que el primer derrumbe afecta su terreno.
Tras los bullados casos causados por socavones en el campo dunar de Reñaca Norte, se reveló otro caso similar en Cachagua. En este mismo sector una investigación de 2001 ya revelaba la fragilidad de estos ecosistemas y explicaba por qué no se debían intervenir y menos construir edificios habitacionales.
El gobernador de la Región de Valparaíso señaló también que “jamás debieron haberse desarrollado proyectos inmobiliarios sobre ecosistemas que están absolutamente fragilizados”. Por otro lado, la autoridad regional enfatizó que se necesita una nueva ley de urbanismo y construcción, con foco en la protección del medio ambiente.
Dos propietarios y un exarrendador de los edificios afectados por los deslizamientos de tierra ocurridos en las dunas de Viña del Mar cuentan cómo han vivido una emergencia que no esperaron experimentar jamás. Mientras, retiran los últimos enseres que quedan en sus antiguos hogares, sin tener la certeza de cuándo (o si es que) podrán regresar.
Un informe del servicio alertó en 2012 que no era "razonable tener construcciones" en esa zona, pero el director Patricio Aguilera asegura que se construye porque eso está reglamentado por los Instrumentos de Planificación Territorial (IPT), como los planos reguladores. Añade que "el Santuario de la Naturaleza en Concón no es posible preservarlo con la construcción de edificaciones".
La formación de un probable nuevo sistema frontal, el que podría dejar algunas lluvias en la costa de la Quinta Región, vuelve a poner presión sobre el futuro de estas dos construcciones.
Tras el reciente socavón provocado en el campo dunar de la Quinta Región, actualmente atestado de edificios, se instaló nuevamente la polémica en torno a la viabilidad de estos proyectos. Una colección de Enterreno muestra cómo era el sector entre los años 50 y 80 cuando no había más que arena.
"Hay una responsabilidad también del sector privado respecto a lo que construye, no es todo tirarle la responsabilidad al Estado, es un poco patudo", dijo la ministra de Obras Públicas, Jessica López.
Además de lo intenso de las precipitaciones que provocaron un segundo socavón y obligaron a la evacuación del edificio Miramar Reñaca, la titular de Obras Públicas señaló que el cambio climático y la construcción sobre dunas son otras razones para explicar lo ocurrido en Viña del Mar.