SEÑOR DIRECTOR
El desafío más trascendental para las familias empresarias es la sucesión generacional. Se construyen nuevos liderazgos y se incorporan visiones innovadoras, no solo en la empresa, sino en todo el ecosistema de la familia. El mismo proceso estamos experimentando en el país. Nuevos líderes y voces han pasado a tomar el protagonismo tanto en la esfera política como en el ámbito empresarial, con los nuevos emprendedores y emprendedoras que propician modelos de negocios transformadores.
El secreto de una sucesión exitosa, independiente de si es a nivel de empresa, familia o gobierno, es actuar con responsabilidad y altura de miras. Entender que la mejor combinación es apoyarse en la experiencia de quienes tienen un camino recorrido y, al mismo tiempo, incorporar el ímpetu y las visiones de quienes protagonizan el recambio; y construir un proyecto conjunto donde los líderes de distintas generaciones puedan tomar decisiones que convoquen a la mayor parte del ecosistema empresarial, familiar y político. Destruir todo para “refundar” es un error, así también como mantener el statu quo.
Es clave buscar el equilibrio para que los procesos de reforma puedan avanzar con cimientos sólidos y nuevos bríos acordes a los tiempos.
Hoy nos jugamos la carta de un nuevo Chile. La generación que llegará en marzo a La Moneda está esperanzada en la construcción de un presente y un futuro mejor. Sinceramente esperamos que este desafío se materialice en un proyecto país que respete la institucionalidad, promueva la libertad para emprender, fomente la paz e impulse el desarrollo de la mano de la innovación, tan importante en el mundo de hoy.
En las últimas semanas, el presidente electo nos mostró esta faceta. Esperamos que en el sillón presidencial sea ésta la que realmente impere.
Magdalena Díaz Le Fort
Gta. Gral Asociación de Empresas Familiares
Comenta
Los comentarios en esta sección son exclusivos para suscriptores. Suscríbete aquí.