Antesala del fallo: Bolivia se declara "optimista" y Chile opta por la cautela

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El agente Grossman junto a los coagentes Silva e Infante, este domingo en La Haya. Foto: AgenciaUno

Evo Morales llegó este domingo a La Haya para liderar la delegación paceña. Equipo de nuestro país admitió "expectación" por la sentencia que la corte entregará este lunes.


La recomendación de su equipo fue no dar declaraciones. En el gobierno boliviano dicen que eso le aconsejaron este domingo a Evo Morales y que el panorama podía cambiar dependiendo de la puesta en escena de la delegación chilena. Esto, para su primer día en La Haya, a la espera de que la Corte Internacional de Justicia dé a conocer este lunes, a las 15.00 (10 de la mañana en Santiago) el fallo por el juicio en el que se busca obligar a nuestro país a negociar un acceso soberano al mar.

El mandatario paceño arribó a las 8.00 a Rotterdam y se trasladó al Hotel Crowne Plaza, en La Haya. Al ingresar, evitó hacer declaraciones y poco después fue al gimnasio del recinto, vestido con una polera blanca de Bolivia. Después, sostendría una reunión con el agente Eduardo Rodríguez Veltzé; el canciller Diego Pary, el coagente Sacha Llorenti, el embajador en la OEA José Alberto Gonzáles, el ministro de Justicia, Héctor Arce, y la titular de Comunicaciones, Gisela López. La cita se prolongó por una hora y se desarrolló mientras Morales desayunaba. Allí analizaron el panorama que podría abrirse tras el fallo.

A esas alturas, más allá de los dichos de Carlos Mesa, los bolivianos mantenían el diseño de esperar qué diría la delegación chilena antes de hablar. Y primero fue el agente de Chile, Claudio Grossman, quien dio declaraciones al llegar al Hotel Hilton, optando por la cautela, evitando entrar en escenarios y repitiendo siete veces "tranquilidad".

Grossman dijo que "uno está con expectación, pero muy tranquilo", y que "no hay un milímetro de territorio de Chile que dejará de ser chileno".

Este lunes, a las 11.00, Grossman y los coagentes María Teresa Infante y Alfonso Silva sostendrán una reunión con los cinco abogados internacionales que confirmaron su asistencia para escuchar el fallo, a quienes se les pedirá que se fijen en aspectos específicos de la sentencia, para que elaboren una síntesis con los puntos esenciales. Ese trabajo será clave para el análisis en detalle.

Tras los dichos del agente chileno, el equipo boliviano decidió hablar transmitiendo "optimismo" sobre el resultado. El primero en hacerlo fue el embajador González, quien señaló que "estamos optimistas (…) pensando en que se va a saldar una vieja herida que todavía sigue sangrando en la región". Recalcó que "cuando se conozca el fallo, haremos todos los esfuerzos para que ese fallo se ejecute". Llorenti, por su parte, comentó que la expectativa es "la mejor de todas" y que "vamos a esperar la lectura del fallo y escucharemos atentos la reacción de nuestros hermanos chilenos".

Varios minutos después reaparecieron Morales y el resto de las autoridades saliendo del hotel. "En conferencia podemos hablar, no en cualquier momento", dijo, sin detenerse y haciendo gestos con las manos. Su ánimo cambiaría después, en un almuerzo al que invitaron a la prensa de su país. Según asistentes, a Morales se le vio distendido. Y así lo reflejó en Twitter: "Hemos compartido un rico almuerzo de comida marina con el equipo que me acompaña y con los periodistas bolivianos, que se trasladaron a La Haya para la cobertura de este día histórico".

Fue lo poco que dijo en el día, además de un video en Twitter, grabado en el avión, en el que sostuvo que "seguro que habrá buenas noticias para el pueblo boliviano".

Gobierno de Morales se resta de vigilia y pide calma

En paralelo a lo que ocurría en La Haya, en Bolivia organizaciones sociales afines al gobierno convocaban a una vigilia a partir de las 6.00 de este lunes en la plaza principal de las ciudades más importantes del país para esperar el fallo.

A diferencia de ocasiones anteriores, en las que organizaron concentraciones masivas -como fue para la presentación de la demanda en 2013, el fallo de excepciones preliminares de 2015 y en marzo pasado durante los alegatos-, esta vez el gobierno paceño optó por una estrategia diferente. "Le pedimos a la población esperar serenamente este fallo y leer tranquilamente cada línea de lo que dicen los jueces", explicó el vicepresidente, Álvaro García Linera, quien reconoció a La Tercera que, aunque están optimistas de obtener un resultado favorable, prefirieron actuar con más cautela, algo distinto a lo que transmitía la delegación de ese país en La Haya.

Por lo mismo, tampoco se convocó a los militares a participar en los actos. Lo único que estaba previsto, dijo el ministro de Defensa, Javier Zavaleta, era el embanderamiento de las unidades militares.

Pese a la importancia histórica que tiene para Bolivia esta sentencia, este domingo solo unos pocos edificios pertenecientes a instituciones públicas amanecieron con la bandera de la reivindicación marítima. La mayoría de los paceños parecían más interesados en un multitudinario maratón en contra de la violencia de género y en un gran acto cultural organizado por el municipio de La Paz, donde no hubo referencias al tema del litigio.

Hasta la noche del domingo, incluso, las organizaciones sociales que habían convocado a la vigilia no instalaban en la Plaza Murillo, frente a la sede de gobierno, en La Paz, las pantallas gigantes que se habían anunciado para que quienes concurran al acto puedan seguir en directo la lectura del fallo.

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