Cuatro “sujetos de interés” y los hallazgos de un descuartizamiento que conmociona Santiago

Policía especializada realizando peritajes.

El cuerpo de un ciudadano colombiano, de 24 años y condenado a libertad vigilada por robo con violencia, fue encontrado en tres partes distintas de la capital. Su cabeza y extremidades fueron repartidas en cajas y bolsas de nylon, las cuales fueron sacadas desde una casa por tres hombres y una mujer. La víctima fue atada de manos, atacada con un arma blanca y escondida en una maleta, antes de ser abandonada en partes.


A las 3.40 de la madrugada se encontró la primera pista de un caso que tiene a la comuna de Santiago en estado de alerta. “Estamos viviendo un momento muy crítico en materia de seguridad en la ciudad”, dijo el gobernador de la Región Metropolitana, Claudio Orrego.

A esa hora del domingo 28 de mayo, Carabineros recibió un llamado de un taxista que le indicaba que había encontrado un cuerpo sin vida en la Alameda, entre Avenida España y Abate Molina. Los policías llegaron al lugar y se encontraron con una escena escabrosa: un cadáver, pero que sólo estaba compuesto por su tronco, un muslo y sus brazos, los cuales estaban amarrados entre sí con una cuerda, a la altura de los puños. Faltaban la cabeza y sus piernas.

Los policías informaron al Ministerio Público y el OS-9 de Carabineros, quienes junto a Labocar tomaron el caso. Había que identificar a la víctima y encontrar a los responsables de decapitar a un hombre en pleno centro de la capital.

Horas más tarde, a las 8.20 de la mañana, se dio con la segunda pista, encontrando a 2 kilómetros del primer sitio del suceso otras partes del cuerpo. En calle Serrano, los policías fueron alertados de la aparición de una cabeza al interior de una caja de cartón.

Según la evidencia que pudo levantar la policía, esta extremidad tenía diversos cortes en el cuello, y evidentes pistas de que se trataba de otra parte del cuerpo del primer hallazgo en la Alameda. Pero los investigadores también detectaron un elemento que podía ayudar a esclarecer el caso: había cámaras de seguridad.

Inmediatamente, lograron levantar el registro audiovisual que estaba en la cámara de Serrano, detectando que durante la madrugada un auto en que viajaban tres personas, paró en la intersección, uno de ellos bajó, abrió la maleta y botó la caja que contenía la cabeza. Luego, el vehículo huyó en dirección al norte.

Ya a esas alturas el mapa comenzaba a configurarse. Se tenía un registro de los presuntos autores del escalofriante homicidio, pero también Carabineros ya podía confirmar la identidad del fallecido: Jhon Sebastián Grueso Vásquez, de 24 años, y con antecedentes penales por robo con violencia.

El joven ingresó como turista en 2017 y dos años después fue condenado por robo con violencia, delito por el cual cumplía su pena bajo libertad vigilada.

Un revelador allanamiento

Mientras los efectivos policiales estaban confirmando la identidad de la persona asesinada, a las 12.05 de la tarde reciben una nueva alerta: en calle Cóndor, los policías encontraron las piernas de la víctima, las cuales estaban guardadas en una bolsa de nylon.

En esa calle también había cámaras, lo que ayudó para seguir desentramando el caso. Así, mediante la búsqueda de registros audiovisuales y seguimientos, se logró establecer un domicilio ubicado en calle Cóndor 853, donde se detectó el momento justo en que cuatro personas salían de esta casa y que mantenían similares características a los que en la madrugada habían repartido el cuerpo por Santiago.

En las imágenes, además, los policías vieron que estas personas -tres hombres y una mujer-, portaban una caja de cartón y una bolsa de nylon, idénticas a las que dejaron en el lugar donde se encontraron las piernas. Posteriormente, al frontis de la casa llegó al lugar un vehículo de color blanco, donde suben los elementos que, creen, llevaban al fallecido.

Detienen a dos personas en operativo policial vinculado al caso del hombre descuartizado en Santiago Centro.

A partir de estas imágenes, la Fiscalía solicitó en el Séptimo Juzgado de Garantía de Santiago una orden de entrada y registro al domicilio desde donde salieron los sospechosos, quienes fueron catalogados por el ente persecutor como “blancos de interés”.

Carabineros, al efectuar la diligencias se encontró con varias sorpresas: la casa estaba deshabitada y en el tercer piso se encontró “evidencia de interés criminalístico” -dice uno de los reportes levantados por la policía-, como el baño donde se habría llevado a cabo el crimen.

Por ahora, los investigadores siguen trabajando en detener a los sospechosos, quienes habrían huido por la Alameda al poniente. Además, se tiene registro de ellos escapando desde el último sitio del suceso, por Bustamante hacia el norte.

El Ministerio Público y el OS-9 indagan, además, quiénes son los responsables del hecho, en cuanto a saber si pertenecen o no a alguna organización criminal que pueda estar operando en el Gran Santiago.

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