Según las declaraciones que se conocieron en su formalización, los venezolanos Alberto Carlos Mejía, Yonder Emilio Blanco Veliz y Neomar Andrés Arismendi Duarte se conocieron trabajando en un local de Bellavista.

En ese bohemio barrio capitalino Wilson Carol del Carmen Verdugo Díaz se movía a sus anchas.

De acuerdo a la indagatoria de la Fiscalía Oriente, el dueño del popular restaurant La Vaquita Sabrosa sería la persona que pagó a los sicarios extranjeros para dar muerte a José Felipe Reyes Ossa, un comerciante conocido como el “Rey de Meiggs”.

Verdugo fue detenido por el OS-9 de Carabineros este miércoles.

En paralelo a la detención, el animador de radio y televisión Francisco Kaminski declaraba ante el Ministerio Público como testigo.

Kaminski es una de las figuras públicas con las que Verdugo y Reyes tenía contacto. Según el animador, debió entregar su testimonio porque recibió “una llamada social” del empresario, el mismo día que murió.

De acuerdo a declaraciones de familiares de Reyes en CHV, “Papi Wilson” mantenía una deuda desde tiempos de pandemia con el comerciante asesinado.

Serían 1.000 millones de pesos los que Verdugo adeudaba y debía pagar semanalmente.

Hípica y gastronomía

“Papi Wilson” tiene fotografías con célebres comensales de La Vaquita Sabrosa, en sus dos locales, de Recoleta y Manuel Montt, entre ellos el actor Keanu Reeves.

También existen imágenes en las que se le ve con Arturo Vidal, con el que se cruzan por el mundo de la hípica.

El sospechoso de pagar por la muerte del Rey de Meiggs llegó a ganar con su stud El Ensayo 2022.

Video en YouTube en los que daba declaraciones por ese triunfo fueron bajados de la red mientras se conocía su vínculo con el crimen.

También existen registros de que asistió al funeral de Reyes, luego que los sicarios -dos en prisión preventiva y uno de ellos fugado- le dieran muerte en las afueras de su domicilio en Ñuñoa, la tarde del 19 de junio.

A los sicarios le ofrecieron $30 millones. El 20 de junio recibieron un pago de $4,5 millones.

De acuerdo a la información recopilada en la indagatoria que lidera el fiscal Sergio Soto, los asesinos, sujetos en situación irregular en el país, fueron contactados por un compatriota de ellos, por encargo de un chileno cercano a la víctima y vinculado a sus negocios. La banda contaba con información privilegiada de sus desplazamientos.