Una Constitución para todas las edades



Por Patricio Saldívar, Fundación GeroZoom, y Eduardo Toro, Fundación Conecta Mayor UC

Tras 10 meses de trabajo, la Convención Constitucional entregó su propuesta de borrador de nueva Carta Magna. De ser aprobada, incorporaría a las personas mayores como titulares y plenos sujetos de derecho. Una buena noticia no solo para las personas mayores, sino también para todos: para el 2050, uno de cada tres chilenos tendremos más de 60 años.

El texto establece además el derecho de las personas mayores a obtener prestaciones de seguridad social suficientes para una vida digna; la accesibilidad al entorno físico, social, económico, cultural y digital; la participación política y social; una vida libre de maltrato por motivos de edad; autonomía e independencia y el pleno ejercicio de su capacidad jurídica.

En esa línea, el borrador de nueva Constitución incluye en uno de sus artículos el respeto a lo dispuesto en la Convención Interamericana sobre la Protección de los Derechos Humanos de las Personas Mayores. Lo anterior representaría un avance ya que, a pesar de ser ratificada por Chile en 2017, las disposiciones de la Convención Interamericana todavía no han sido totalmente implementadas. Esto se manifiesta, por ejemplo, en que el Estado de Chile aún no provee de mecanismos que hagan exigibles y efectivos los principios que allí se consagran.

Significa, también, una importante señal internacional, ya que responde a uno de los retos demográficos más importantes del siglo. A nivel regional, según un análisis de la Cepal, catorce países integran a las personas mayores en su Constitución, observándose una tendencia a abandonar la perspectiva de asistencia social por un enfoque gerontológico de derechos.

Chile tiene una deuda histórica con las personas mayores; sin embargo, la actual Constitución no menciona a este grupo etario. Junto a ello, llama la atención la falta de garantías legales existentes en nuestro país, siendo uno de los que lidera la esperanza de vida en el mundo y que presenta una de las tasas de envejecimiento más aceleradas de la región. Establecer dichos mecanismos es un imperativo para hacer frente a la revolución de la nueva longevidad.

La sociedad civil organizada ha sido clave para impulsar el desarrollo. De cara al proceso constituyente y a incidir en políticas públicas, distintas organizaciones que trabajan para y con las personas mayores se reunieron en 2021 y trabajaron colaborativamente con los convencionales para hacer realidad este logro. El objetivo era promover la construcción de “un Chile para Todas las Edades” y dar una señal sobre cómo hacer política pública de manera colaborativa y participativa.

La incorporación de los derechos de este grupo etario es una señal de que este tema llegó para quedarse y es necesario para impulsar un cambio cultural y de paradigma. El edadismo, o estereotipos y prejuicios por razón de edad, es la tercera causa de discriminación más alta en el mundo, lo que afecta física y mentalmente no sólo a las personas mayores, sino que a la sociedad en su conjunto. En este sentido, las cifras son alarmantes: aun cuando el 86% de las personas mayores son autovalentes (Senama), el 63% de la sociedad cree que no pueden valerse por sí mismas. Debemos cambiar la manera de enfrentar el envejecimiento.

Comenta

Los comentarios en esta sección son exclusivos para suscriptores. Suscríbete aquí.