Esta respuesta es relativa. Depende del tipo de pan y la cantidad que se consuma. Además hay que considerar los demás alimentos que se ingieren durante el día. Hay panes que son más calóricos, como el amasado, ciabatta, panes de hoja, y otros que son menos calóricos, como el pan molde o pita. Esto no quiere decir que se puedan comer estos dos últimos a destajo, ya que de hacerlo se incrementa la ingesta calórica. Lo mismo que pasaría si además de comer un pan pita, o una o dos rebanadas de molde, se ingieren entre comidas, galletas, caramelos o chocolates.

* Nutricionista del Centro de Tratamiento de la Obesidad Red de Salud UC CHRISTUS.