La poda que alista Colo Colo para la temporada 2026
Sin Copa Libertadores a la vista e incluso con la Sudamericana como un consuelo lejano, Blanco y Negro proyecta una limpieza millonaria para evitar un descalabro mayor en el aspecto financiero.

Colo Colo prepara un remezón. En Blanco y Negro asumen que el plantel de 2026 tendrá poco de parecido con el actual. Y más que un giro deportivo, se trata de una urgencia financiera. El club enfrenta un escenario económico complejo, marcado por un año decepcionante en la cancha y la creciente posibilidad de quedarse sin torneos internacionales para la próxima temporada. La suma es letal. Menos ingresos, castigos todavía pendientes por los incidentes frente a Fortaleza (del 10 de abril) y un presupuesto tensionado tras un mercado ambicioso que no dio resultados.
Incluso, si el equipo alcanza el último cupo a la Copa Sudamericana, el panorama no cambia demasiado. La clasificación hoy parece lejana, y aun concretándose aportaría un premio menor en comparación al principal objetivo que se escapó temprano: la Copa Libertadores. La frustración deportiva se profundizó con la caída frente a Coquimbo Unido y el empate ante Limache.
La dirigencia ya se mueve para ejecutar una poda salarial profunda. Las salidas proyectadas incluyen a Sebastián Vegas, a quien Colo Colo le deposita 70 millones de pesos mensuales y Monterrey otros 70, Emiliano Amor (30 millones), Óscar Opazo (30 millones) y Salomón Rodríguez (40 millones). También está el caso de Brayan Cortés, a quien se busca facilitar su permanencia en Peñarol. Mientras que Esteban Pavez, con un sueldo superior a los 30 millones, está en la puerta de salida y tiene a Coquimbo Unido siguiéndolo para su aventura en la Libertadores. A esto se suma que en el club asumen que Claudio Aquino, con un salario cercano a los 70 millones, puede solicitar su desvinculación. En total, la operación podría liberar más de 200 millones mensuales.
La brecha que duele
En Blanco y Negro los números se han transformado en un dolor de cabeza. Incluso si es que van a la Sudamericana. Un club que accede directo a la fase de grupos de la Copa Libertadores asegura US$ 3 millones solo por participar, más US$ 330 mil por triunfo. En la Sudamericana, por participación en fase de grupos apenas se aseguran US$ 900 mil, con bonos de US$ 115 mil por victoria. Es decir, un recorrido correcto en el segundo certamen en importancia de la Conmebol ni siquiera se acerca a los ingresos mínimos garantizados en el principal certamen del continente.
La resignación se mezcla con la necesidad. Más que una renovación planificada, lo que se aproxima en el Monumental es un reajuste de supervivencia.
En ByN asumen que el mercado de 2026 será austero. “Vamos a tener que rebajar los costos del plantel, aunque quedemos en la Copa Sudamericana, porque la caja no nos da. Estamos con problemas de caja, de fútbol y en los proyectos que íbamos a desarrollar”, señaló el director Ángel Maulén a mitad de semana.
“Nos preparamos mucho para el centenario y para avanzar en algo en el estadio, pero ha sido un fracaso absoluto. Especialmente el fracaso en lo deportivo. Tenemos un plantel que nos costó carísimo y el otro día empatamos con Limache. Más allá de cualquier parafernalia que quiera hacer la actual directiva, ha fracasado, y lo ha hecho en un momento donde gastamos mucho dinero en lo deportivo”, complementó el representante del bloque Vial, opositor al timonel Aníbal Mosa.
Este escenario también afecta al entrenador. El vínculo de Fernando Ortiz contempla objetivos deportivos y su continuidad dependerá de alcanzarlos. La cláusula “anti-Almirón”, que permite revisar el contrato si el club no clasifica a torneos internacionales, está cada vez más cerca de activarse. “El presidente lo dijo muy claro, hay requisitos. Eso no quiere decir que tenga la posibilidad de salir o quedarme, pero son objetivos trazados. Estoy confiado en que los conseguiremos”, reconoció el DT este jueves.
Puertas adentro, el clima no es el mejor. La inconsistencia del equipo, sumada a episodios extrafutbolísticos, han generado tensiones. Pavez se quejó por no jugar. El viaje de Arturo Vidal a Brasil durante los días libres encendió otra polémica al no ser informado al club. Algo similar a su participación en la Kings League. El Rey, además, ha puesto en duda su continuidad. Así, el centenario que debía ser una celebración acaba siendo un punto de inflexión.
COMENTARIOS
Para comentar este artículo debes ser suscriptor.
Lo Último
Lo más leído
1.
3.
4.



















