La nueva cancha del Monumental está lista: las historias detrás de la refacción de la casa de Colo Colo

Colo Colo ya la luce con orgullo. “Lista nuestra casa para recibir al campeón”, se titula un video que el Cacique publicó en sus cuentas en las redes sociales para dar cuenta del término de las obras relacionadas con su principal realización en el último tiempo: la profunda remodelación de la cancha del estadio Monumental. Con propiedad, se puede hablar del nuevo campo de juego del recinto de Macul. Y con la misma certeza, de uno de los mejores de Sudamérica: el Cacique se inspiró en escenarios como los de Gremio, de Brasil, y River Plate, de Argentina, para dar con una mezcla de pasto que soporte todas las condiciones climáticas que se producen durante el año y, fundamentalmente, que garantice una óptima presentación a la vista de quienes asistan al reducto o presencien los partidos a través del televisor.

Las obras, que comenzaron a mediados de noviembre, junto con el término de la exitosa campaña que los albos cumplieron en 2022, en la que celebraron el título, ya están concluidas. A comienzos de enero ya fue posible observar avances significativos.

Ahora está en los últimos detalles. En las imágenes que difundió el club, de hecho, se puede observar el proceso de marcado de los límites del campo de juego y, principalmente, que el pasto está totalmente consolidado y dispuesto para las grandes exigencias que deberá resistir en un calendario que incluye el Campeonato Nacional, la Copa Chile y la Copa Libertadores. Se estrenará este lunes, en el partido ante Ñublense, un duelo al que el equipo de Gustavo Quinteros llega con la obligación de enmendar la paupérrima imagen que dejó en la goleada frente a O’Higgins.

El proyecto cumplió varias etapas. El diagnóstico consideraba que el 40 por ciento del pasto antiguo estaba contaminado con otros y que se requería de un nuevo drenaje espina de pescado, que pasó de dos a cuatro aguas. En la primera se encargó la preparación del nuevo pasto. Luego se realizó el escarpe. Es decir, la extracción de una capa de 10 centímetros. Posteriormente, se procedió a la construcción del nuevo sistema de drenaje, la preparación de una capa perforada, la nivelación del terreno y, finalmente, a la instalación del pasto en big rolls, que fueron encargados a un proveedor de primera categoría en el país. El césped se mantuvo en viveros hasta que se pudo colocar en la superficie del campo de juego albo. En todo el proceso, incluso después de la instalación, se ha utilizado tecnología de punta. “Es un pasto de primer nivel, que se cambia después de 33 años y una modificación necesaria para un equipo como Colo Colo”, enfatizan en el club popular.

Sin embargo, no solo lo estrictamente técnico fue una materia de la que ocuparse. El club también tuvo que preocuparse de un factor clave: ahuyentar a las aves que podían poner en peligro los trabajos, al comerse las semillas del nuevo césped. Hubo que apelar al trabajo y al ingenio de los funcionarios del Cacique para espantarlas.

La técnica es una más de tantas que se suelen utilizar con este propósito. En Argentina, por ejemplo, River Plate ‘fichó' a dos gavilanes para alejar a las palomas que pudieran merodear la superficie.

Cuando se iniciaron los trabajos, junto con anunciar la completa renovación del añoso sistema de drenaje, el Cacique explicó la elección de la mezcla que se utilizaría para garantizar la presentación y rendimiento óptimos del campo de juego. Hasta ese momento, estaba compuesto por una mezcla de clima cálido, integrado por bermuda y kikiyú. “Crece mejor bajo sol completo y altas temperaturas. Se vuelve inactivo y de color café en el invierno. Alta resistencia a la sequía. Puede dañarse fácilmente con el tráfico durante los meses de invierno cuando no está creciendo, dándole oportunidad a las malezas a invadir. Es de textura media a gruesa con un tono entre gris a verde. Híbridos son de textura mas fina y varían en color de verde-azul intenso a verde oscuro. Se extiende a través de rizomas y estolones. Altura de corte entre dos y cinco cm”, describía una publicación de la Universidad de California para la primera especie.

Respecto de la segunda, puntualizaba: “Pasto de estación cálida que se esparce rápidamente y prospera en áreas te temperatura moderada. Susceptible al frío, de crecimiento muy agresivo que le permite dominar los demás tipos de pasto que se siembran con él. Provee un pasto muy agradable por el color de sus hojas y su textura. Soporta el tránsito intenso, pero no tolera sombras. Se recupera rápido de daño por uso moderado o de daño severo. Antes era considerado como una maleza. Ahora se le usa algunas veces como un tipo de césped. Algunas veces se confunde con el pasto San Agustín. Se extiende por semilla, rizomas y estolones. La altura de corte ideal es entre tres y cuatro cm”. Eso explicaba, en alguna medida, los manchones que se producían en época invernal.

Ahora, la apuesta es distinta. En septiembre comenzó el proceso de siembra de la nueva combinación. Se trata de una bermuda híbrida enana (Cynodon dactylon x Cynodon transvaalensis). La elección estaba basada en los beneficios que ofrece: es tolerante a la sequía, de bajo requerimiento hídrico, presenta una alta densidad y una textura fina y suave, tiene un crecimiento agresivo y dominante y ofrece una alta resistencia al tránsito, con una buena recuperación. Se trata de una especie de clima cálido, que en la temporada de otoño invierno entra en latencia y requiere de sobre siembra en esta parte del año.