El importante rol que cumplirá Chile en las elecciones de la FIFA

Gianni Infantino, presidente de la FIFA, en la ceremonia de los premios The Best. REUTERS/Sarah Meyssonnier.

Este jueves, la máxima organización del fútbol mundial celebrará sus nuevas elecciones presidenciales con el suizo como única opción presente en el voto. De esta forma, el dirigente de 52 años se quedará en el poder al menos hasta 2027, pues desde ya tiene intenciones de seguir incluso hasta 2031.



El mandato de Gianni Infantino no ve obstáculos en su horizonte. Este jueves, tendrá lugar el 73° Consejo de la FIFA en Kigail, capital de Ruanda, país ubicado en África Oriental. En dicha instancia, se realizarán las elecciones presidenciales de la máxima organización del fútbol a nivel mundial, donde hay un solo candidato: Gianni Infantino, el actual presidente de la Federación.

Teniendo en consideración que el nacido en Suiza está corriendo solo por la candidatura, su mandato se extenderá al menos hasta 2027. Según indican los estatutos de la FIFA, un presidente puede estar en su cargo máximo por tres reelecciones de cuatro años, lo cual coincide con esta situación, pues Infantino arribó en 2016 y fue reelegido en 2019.

Sin embargo, para él esta recién será su primera reelección, pues según su consideración, el mandato entre 2016 y 2019 estuvo incompleto. El motivo se debe a que su llegada se dio en medio del FIFA Gate, el cual vio la salida apresurada de Joseph Blatter del cargo. Por esto, el actual mandamás estuvo los primeros nueve meses bajo la presidencia de Blatter, ante lo cual considera que su actual mandato (comenzado en 2019) es el primero. De esta forma, el dirigente de 52 años también aspira con firmeza a quedarse hasta 2031.

“Pensando en este séptimo aniversario, me gustaría simplemente dar las gracias a todos aquellos que me han ayudado, y son muchos, a hacer de la FIFA una organización mejor, un lugar mejor” expresó el italo-suizo hace un mes, cuando celebraba sus siete años al mandato.

Con estos antecedentes, este jueves las 211 federaciones que integran la FIFA van a disponer únicamente de una opción en la lista para votar, a menos que se decida marcar una desaprobación simbólica, lo cual es menos probable.

Pablo Milad, presidente de la ANFP, ya se encuentra en Ruanda para los comicios. Eso sí, el timonel del fútbol chileno asistirá como representante de la Conmebol, ya que será Jorge Yunge, secretario general de la sede de Quilín, quien representará a la federación nacional. De hecho, según señalaron en la asociación, Chile tendrá una importante labor en el proceso, ya que será ministro de fe en las elecciones de la FIFA.

De hecho, el timonel del fútbol nacional fue emplazado por Michael Clark, mandamás de Azul Azul, por haber emprendido el mencionado viaje hacia Ruanda sin mostrar preocupación por la agresión que sufrió Cecilia Pérez en el Superclásico.

Los pilares de su mandato

Los principales puntos a favor que ha tenido Infantino durante su extenso periodo como presidente se centran en la reforma al sistema de traspasos. Desde que llegó al poder, expresó que este era uno de sus objetivos centrales, y los cumplió basándose en diversos mecanismos de protección para todos los deportistas que rodean el mundo del fútbol.

Entre dichas reformas, se incluyó un marco regulador para los representantes, estableciendo normas éticas y profesionales, además de brindarles protección tanto a ellos como a sus clientes. Adicionalmente, reforzaron las normativas referentes a víctimas de violencia sexual, ofreciéndoles mayor protección y eliminando la prescripción de casos que incurran en estas infracciones.

Otro de los puntos más destacados fue la protección a las jugadoras profesionales que debían ser baja en sus respectivos equipos por maternidad, otorgando mayores garantías para quienes estén en dichas condiciones bajo contrato vigente. También se destaca la creación del Tribunal de Fútbol, el cual sirve para agilizar los procesos referentes a disputas por reglamento, relaciones contractuales, entre otros. De hecho, la disputa entre Juan Martín Lucero y Colo Colo por la polémica salida del delantero fue llevada hasta dicha instancia.

A la hora de hablar sobre balance financiero es donde el actual presidente de la FIFA saca mayor ventaja. El 14 de febrero del presente año, el sitio web oficial de la Federación señaló que, durante el ciclo 2019-22, se generaron ingresos de 7,600 millones de dólares, lo cual es una cifra histórica e inédita. Esto significa un aumento del 18% respecto al ciclo anterior (2015-18), y para el periodo comprendido entre 2023 y 2026, el organismo se proyecta a llegar a los 11 mil millones en la divisa norteamericana.

Derechos humanos

Por ahora, la Federación Noruega de Fútbol puede ser la única dificultad que se le presente a Infantino en las elecciones. Esto, porque con anterioridad presentaron una propuesta para un debate en dicha reunión. El objetivo de esta tiene que ver con las violaciones a derechos humanos ocurridas durante la organización del Mundial de Qatar. Precisamente, dicha Federación solicita a la FIFA cumplir con su compromiso en materia de derechos humanos y mecanismos de reparación relacionados con el torneo, incluyendo una investigación de las muertes y lesiones que se hayan provocado a raíz de la mencionada competición.

La situación no pasará desapercibida, pues en su momento se pronunció incluso el director de Justicia Económica y Social de Amnistía Internacional, Steve Cockburn. “Esta reunión ofrece otra oportunidad para que la FIFA repare el daño y establezca un plan y un calendario firmes para indemnizar de forma directa y rápida a los trabajadores y a sus familias, que sufrieron terribles abusos contra los derechos humanos para que se celebrase una Copa Mundial levantada sobre su sacrificio” expresó.

El nuevo Mundial de Clubes

Por otra parte, el mandato de Infantino también presentó el nuevo Mundial de Clubes que se jugará a partir del 2025. La competición contará con 32 equipos y se disputará cada cuatro años, similar a las ediciones previas del Mundial de selecciones. La decisión fue rechazada y criticada en su momento por el Foro Mundial de Ligas (WLF).

La agrupación apuntó principalmente al colapso en el calendario que significa esta nueva competición, lo cual puede tener consecuencias negativas en la salud de los jugadores y, por lo tanto, en el desarrollo de las demás competiciones, ya sean domésticas o internacionales. Además, señalaron que la decisión se tomó de forma unilateral, sin siquiera consultarles por su posición.

Adicionalmente, mencionaron la ampliación del Mundial de 2026 a 48 selecciones como una problemática adicional a la sobrecarga para los jugadores, aunque dicho reclamo se dio antes de que el nuevo formato fuese confirmado. Ahora, más selecciones tendrán la oportunidad de jugar, al menos, cuatro partidos, mientras que los finalistas jugarán ocho en total. Eso sí, la distribución se dará a lo largo de 40 días, donde la misma FIFA argumentó que se busca otorgarles un descanso acorde a los deportistas.

De esta forma, el nuevo formato de la cita mundialera en Norteamérica será el proyecto emblema de Infantino para su nuevo proceso, pues los dirigentes europeos que guardan cierta oposición al mandato del presidente tampoco fueron capaces de ponerse de acuerdo para proponer a un nuevo candidato con opciones de quedarse en la cima de la jerarquía del balompié mundial.

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